Juan Carlos Díaz se refirió a su parecer por el anuncio realizado por el MOP la semana pasada, donde “en la actualidad nuestra ciudad está prácticamente cortada en dos, por la línea férrea y la Ruta 5”, la que aumentaría a tres de concretarse este proyecto.
TALCA.- Profundo malestar y desazón por el aviso realizado por el ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, provocó en el alcalde de Talca, Juan Carlos Díaz.
Durante la semana pasada, el titular de la cartera del MOP señaló que “Ya está tomada la decisión de hacerlo. Todavía no tenemos trazado el diseño. Pero la resolución es abordar el tema de acceso a Talca con esta modalidad vial (bypass)”, lo que en la máxima autoridad talquina genera “una ‘decisión’ que me desconcierta por completo y que rechazo contundentemente”.
Díaz señala que “en la actualidad, nuestra ciudad está prácticamente cortada en dos, por la línea férrea y la Ruta 5, y tenemos muy pocos pasos a desnivel. Ante este problema, realizamos en nuestra comuna un proceso de participación de dos años, que tenía como objetivo principal escuchar a los vecinos y realizar propuestas a las autoridades, principalmente al Ministerio de Obras Públicas (MOP)”.
Ante eso, el alcalde atribuye que esta decisión es producto que “las autoridades nacionales observan al país desde la capital, y parecen olvidar por momentos el inmenso territorio que representa el resto de las regiones de Chile, entre las que está el Maule, con Talca como su principal urbe.”
Señala que, como municipio, plantearon al MOP que “ante el nuevo proceso de relicitación de la ruta 5 Sur, teníamos la oportunidad de generar mejores accesos a la ciudad. De hecho, la Cámara Chilena de la Construcción propuso un proyecto que permite encajonar la vía con cuatro pasos a desnivel para mitigar o resolver el problema histórico de la congestión vial”.
También señaló otras obras que se tienen en carpeta como “el ensanchamiento del puente a la altura del sector El Tabaco y, además, crear una tercera pista (de la Ruta 5 Sur”, señalando que en su momento “la respuesta del MOP fue acogida de forma positiva”.
La molestia de Díaz radica en que “el ministro Fontaine difundió a través de la prensa que ‘ya está tomada la decisión’” de construir un bypass, a tan solo seis meses de licitar el proyecto y sin saber aún en qué lugar exactamente sería construido”, atribuyendo lo anterior que eso es una improvisación por parte de este secretario de Estado.
Las razones que un bypass sería perjudicial para la capital del Maule radica que, aparte de costar 500 millones de dólares esta nueva obra vial, dividiría a la capital, sin ir “acorde al desarrollo urbanístico de Talca”, los recursos para mejorar la Ruta 5 Sur “se irían al bypass”; y que esta nueva obra sería una solución provisoria, ya que en el corto plazo los nuevos loteos llegarían hasta esta vía”.
A lo anterior agregó que este desvío se encuentra “en total oposición en la intención de unión de las comunas Talca-San Clemente”, “ocuparía terreno agrícola y lo fragmentaría”; que el nuevo camino sería más largo y, por esto es “probable es que los vehículos sigan pasando por la ruta actual”; y se perdería de paso la “prioridad de la construcción de las cuatro conexiones oriente-poniente de la comuna”.
Realizó un llamado “a todas las fuerzas vivas, a parlamentarios, al intendente, a universidades, colegios de arquitectos e ingenieros, a los vecinos y a los medios de comunicación a que no permitamos que esto ocurra en nuestra ciudad”.
Finalmente, señala Díaz que “como alcalde de Talca buscaré todas las herramientas legales para exigir que se nos respete como ciudad. Cuando pensamos en la Ruta 5, no solamente tenemos que tener en mente la conectividad del país, que es importante, sino saber que esta ruta fue construida con muchas precariedades y dejó muchas cosas pendientes”, comparando esta lucha que emprenderá a la que sostuvieron “David contra Goliat, pero recuerden que David ganó la batalla”.