Con seis votos a favor, una abstención y dos en contra.
TALCA.- La mañana de este jueves se realizó un concejo extraordinario en el municipio de Talca, específicamente para aprobar o rechazar la renovación de patentes en la capital maulina.
Una de ellas fue la de la Ex Boulevard de Talca. Donde hace menos de dos semanas se produjo una balacera en este lugar, donde un vecino grabó lo sucedido en el recinto y lo difundió por redes sociales donde al menos hubo tres disparos.
En esta votación el concejal Hernán Astaburuaga decidió rechazar la renovación, el concejal Ervin Castillo se abstuvo de votar, la concejala Paula Retamal también rechazó, argumentando entre otras cosas la falta de seguridad en el lugar y sector. Por su parte, el concejal Patricio Mena hizo un llamado al dueño de la patente a preocuparse y asumir responsabilidades en el entorno del lugar en temas de seguridad, los días que el local funcione, y aprobó la renovación de la patente.
La concejal, Carolina Soto, aprobó la renovación asegurando que “quiero que quede en acta la preocupación que tenemos y comprometiéndome a poder generar un mayor proceso de fiscalización”.
La concejal, Javiera Carrera en su intervención explicó que “por un lado hay vecinos que no están conformados que reclaman y una junta de vecinos que le quita gravedad a Boulevard. Yo no tengo ningún elemento objetivo para rechazar esta patente. Los vecinos saben que tienen el apoyo nuestro para hacer el seguimiento en los próximos seis meses”, de esta manera la concejala aprobó la renovación de la patente.
Por su parte, el concejal Marcelo Rojas, dijo que yo no tengo ningún sustento jurídico para no abobarla, por lo tanto, yo apruebo la patente”. El concejal, Juan Carlos Cáceres, dijo que es una patente que lleva más de 20 años, conocida por toda nuestra ciudad, ellos tienen un derecho adquirido de estar en el lugar. Además, no hay un informe en contra de la junta de vecinos”. Cerrando que “por esta vez, yo voy a aprobar la patente”.
Finalmente, la concejal Melania Moya aprobó también la patente argumentando que “ellos tienen un derecho adquirido de estar en el lugar”.